Perito confirmó sangre en la casa y reveló que el dije hallado estaba "deformado por fuego"
En la octava audiencia del juicio por jurados por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, un perito de la Policía del Chaco aportó pruebas clave.
Avanza el juicio por el femicidio y se suman nuevas evidencias presentadas ante el tribunal, en este caso el aporte de un perito de la Policía del Chaco aportó pruebas clave que vinculan directamente los objetos secuestrados con la víctima y el escenario del crimen, reforzando la hipótesis de la fiscalía sobre el accionar del clan Sena.
El especialista confirmó que un anillo, un dije con forma de cruz y una cama con rastros de sangre humana fueron hallados durante los allanamientos y que todos ellos guardan relación con Cecilia, según el cotejo de fotografías extraídas de sus redes sociales.
El perito describió con detalle que el dije presentaba signos de haber sido "deformado por fuego", como si hubiera sido sometido a una quema prolongada que le quitó el brillo y alteró su estructura original. El dato encendió las alarmas dentro de la sala: todo apunta a un intento deliberado de eliminar rastros biológicos y materiales del crimen.
La cama secuestrada, por su parte, dio resultado positivo a sangre humana, lo que —según la querella— sitúa a Cecilia en la vivienda de los Sena al momento de su desaparición.
Antes de concluir la audiencia, la jueza pidió a los testigos no dar declaraciones a la prensa para evitar influir en quienes aún deben declarar, una advertencia que muchos interpretaron como un gesto de control sobre la exposición pública del proceso.
Desde la querella particular, calificaron la jornada como "muy positiva", al sostener que los testimonios periciales refuerzan la tesis de que el clan Sena planificó, ejecutó y luego intentó borrar las huellas del femicidio.
