La CGT define una nueva conducción
La Confederación General del Trabajo (CGT) se reúne este miércoles para elegir a sus nuevos dirigentes, en un contexto marcado por disputas internas, reclamos salariales y un clima social que sigue en alerta.
La central obrera más importante del país desarrollará un Congreso Nacional para renovar autoridades y definir el rumbo político del movimiento sindical frente al Gobierno nacional. Si bien la conducción actual se encuentra encabezada por una cúpula cegetista de tres secretarios generales, fuerte presión interna impulsa cambios en la estructura y la representación de sectores que aseguran haber sido relegados.
Los gremios del transporte, estatales, comercio, metalúrgicos y construcción buscan ratificar posiciones de poder, mientras que las organizaciones sociales y sindicatos de base reclaman mayor protagonismo en la mesa chica de decisiones.
La discusión central está atravesada por el escenario económico: pérdida del poder adquisitivo, inflación persistente y negociaciones paritarias trabadas en varios sectores. La CGT analiza endurecer su postura, sin descartar nuevas medidas de fuerza si no hay avances en materia salarial y laboral.
El resultado de esta elección será clave para entender qué estrategia adoptará la central obrera durante los próximos meses: si profundizar la confrontación o apostar al diálogo político.
El movimiento obrero se juega una definición que podría reordenar el mapa sindical argentino.